sábado, 11 de octubre de 2014

Paraíso Inhabitado, Ana María Matute.

"Ahora la niebla sólo es niebla, conocida y húmeda, fría y casi desprovista de misterio. 

Pero no entonces. 

Entonces, el mundo empezaba cuando yo saltaba sigilosamente de la cama, me asomaba a la puerta y vigilaba cautelosamente el largo pasillo que conducía a la otra puerta, la que me llevaría a la habitación más misteriosa de la casa [...]."

"A veces, los recuerdos se parecen a algunos objetos, aparentemente inútiles, por los que se siente un confuso apego. Sin saber muy bien por qué razón, no nos decidimos a tirarlos y acaban amontonándose al fondo de ese cajón que evitamos abrir, como si allí fuéramos a encontrar alguna cosa que no se desea, o incluso se teme vagamente. 

[...] 

No puedo permitirme el disimulo ni la falsedad, porque estoy recuperando recuerdos, retazos de un barco de papel arrinconado al fondo de un cajón que nunca tuve valor para abrir."

Paraíso Inhabitado, Ana María Matute.

No hay comentarios:

Publicar un comentario