"-Perdóname por haber tenido que presenciar lo que sucedió.
-En mi casa lo olvidaré todo.
-Una vez dijiste que jamás me olvidarías. [...]
-Es preciso que olvide. De lo contrario no tendré fuerzas para vivir. [...] Te quedaste aquí tanto tiempo, que a mí se me acabó el mío."
-En mi casa lo olvidaré todo.
-Una vez dijiste que jamás me olvidarías. [...]
-Es preciso que olvide. De lo contrario no tendré fuerzas para vivir. [...] Te quedaste aquí tanto tiempo, que a mí se me acabó el mío."
El retrato de la señora Moskowicz; Kenaz.